- A nivel nacional hay una pérdida de inscripción de 15 millones de personas, muchos de ellos elegibles para enrollarse.
Los Ángeles, Cal.- Muchos de los niños y gente en general que han perdido Medicare (Medi-Cal en California) tras su determinación, aún son elegibles para enrollarse y obtener cobertura de salud. Expertos indicaron que hay 4 millones de latinos menos inscritos en el programa de salud federal y estatal que ha que perdido un total de 15 millones de personas en todo el país.
Tan solo en niños se estima que 5.50 millones han pedido su cobertura al 31 de Julio de este año, siendo uno de los grupos más impactados. Texas es uno de los estados en los que más niños han perdido su cobertura de salud con 1.3 millones.
Durante una video conferencia organizada por Ethnic Media Service el pasado viernes 9 de agosto expertos en el tema de salud informaron que son perdidas históricas con 2,4 millones de inscritos afroamericanos, siendo las comunidades de color las más impactadas.
Stan Dorn, Director del Proyecto de Política Sanitaria de UnidosUS dijo que los afroamericanos, latinos y asiáticos americanos tienen más posibilidades que no sean determinados para continuar con Medicare que los blancos.
Indicó que Medicare cubre a 4 millones de latinos menos que antes y en cuanto a la comunidad afroamericana 2.4 millones, lo es dijo perdidas históricas.
Lamentablemente comentó que las cancelaciones se deben a papeleo porque la administración del estado pide información.
Refiriéndose a una encuesta sostuvo que el 30% de los beneficiarios de Medicare no recibieron o pudieron leer el papeleo y el 60% de las personas tuvo problemas con el procesamiento porque no sabían qué rellenar.
Otra diferencia que notó Dorn fue la gran cancelación entre los estados, indicando que hay 5 estados con una disminución del 29% de personas que perdieron su Medicare.
Dorn resaltó que los problemas de la cancelación han existido de desde hace tiempo y que es necesario hacer una mejor labor eliminando las cargas administrativas y una elegibilidad sin papeles para las personas que ya tienen su información de sus impuestos, en vez de quitarles su elegibilidad.
También dijo que se requiere personal capacitado de ayuda y continuar con la cobertura continua. “Si las personas ya tienen cobertura, no hacer fácil que la pierdan”, opinó y agregó “necesitamos hacer un mejor trabajo e incentivos para hacer lo correcto”.
Al respecto dijo que hay algunos estados que no quieren pagar un porcentaje para implementar los cambios, pero que a nivel federal se pueden hacer esos cambios.
“Que la redeterminación sea sin papeles, como el seguro de los niños en el 2009 con Medicare y CHIP”, comentó.
Joan Alker, Directora Ejecutiva y Cofundadora del Center for Children and Families y Profesora de Investigación en la Universidad de Georgetown sostuvo que hay que reinscribir a los niños que han perdido su Medicare, más aún ahora que regresan a la escuela.
Comentó que la misión de su organización es que los niños tengan acceso a salud asequible y de calidad y en que Medicare es la primera que responde a crisis como la emergencia de salud de Covid-19.
Explicó que durante la pandemia no se requirió la reelegibilidad o redeterminación pero que ahora han estado revisando a todas las personas su elegibilidad, lo que es un proceso inmenso.
Dijo que hay 15 millones de personas menos que están inscritos en Medicare, liderando estas pérdidas los estados de Texas, seguido por Florida y California en donde 1/3 de los niños inscritos han perdido su inscripción.
Al 31 de julio del 2024, estimó que unos 5.5 millones de niños han perdido su cobertura de salud, siendo la comunidad racializada la que ha sido impactada de gran manera.
Sin embargo, la experta dijo que muchos de los niños, incluidos los niños o niñas indígenas, que han perdido su cobertura aún son elegibles para el seguro de salud. “Algunos estados están repensando su sistema de re-elegibilidad y están cambiando sus políticas para cubrir a todos los niños hasta los 6 años y los padres no tienen que estar preocupados por la pérdida de cobertura de salud de sus niños”.
Alker mencionó que por la pérdida de cobertura los padres no pueden pagar la factura médica y no están llevando a sus niños al doctor.
“Los niños no reciben sus medicamentos. Muchos niños con asma necesitan aparato para respirar y muchos an salteado sus medicamentos por no tener póliza de salud y eso no es aceptable”, afirmó al agregar que muchos de los niños necesitan cuidado continuo y se está subestimando la rutina médica a pesar que son elegibles para la cobertura de salud.
La experta recomendó que si el padre o madre del niño o niña es elegible para Medicare tienen que pedir al pediatra de sus hijos ayuda o en su clínica, escuela, guardería, su iglesia o en organizaciones de su comunidad que son de su confianza.
Martha Sánchez, Directora de Política Sanitaria y Defensa de la organización Jóvenes Invencibles dijo que trabaja con investigaciones y abogacía para los jóvenes hasta los 24 años, asegurando que los jóvenes también se enferman.
Indicó que la mitad de ellos, jóvenes hasta los 34 años, tienen una enfermedad crónica como la obesidad y diabetes, así como 1/3 de ellos están enfrentando una enfermedad de crisis de salud mental como depresión, sentirse solos y ansiedad.
“Hay mucha necesidad de mejorar el cuidado de la salud de esta población que es el futuro de la fuerza laboral de los Estados Unidos”, consideró tras decir que la tasa de los jóvenes que no tienen seguro de salud es de 47%.
Y que según estadísticas de salud demuestran que los jóvenes cada vez más sufren de un cáncer severo, como el de colón, enfermedades que regularmente afectan a personas más grandes de edad.
“Estamos enfrentando una crisis de salud que es que el sistema de salud no está atendiendo a los jóvenes”, afirmó al explicar que muchos de los jóvenes no saben inscribirse a un plan y no se dan cuenda de la ayuda barata si no son elegibles para MediCal, que hay Obama Care.
Dijo que un joven le comentó que nunca hubiera aprovechado la cobertura de salud mental porque sus padres tenían el estigma en esos recursos de salud. “Queremos que utilicen los servicios y no solo se frustren por las citas médicas”, recomendó la experta.
Alker mencionó que en general hay una buena red de acceso para el cuidado primario en pediatría y ginecológico, pero reconoce que en los estados hay una escases general en los proveedores de salud de cuidado dental y de salud mental, aún para las aseguranzas privadas en donde hay listas de espera.
Sobre la aceptación al Medical debido al pago a los proveedores, Sánchez comentó que se debe aumentar el pago, disminuir el papeleo e incrementar la fuerza laboral que sea diversa y sensible porque muchos jóvenes no entran a las áreas de salud mental porque son costosos.
“Cuando los afroamericanos y latinos tienen maestría, son pocos, y si no les van a pagar lo que merecen cómo van a pagar sus deudas estudiantiles”, agregó “La solución es becas, pero el gobierno debe invertir en la fuerza laboral, para que los estudiantes se comprometan a trabajar en áreas de bajos recursos”, comentó como una de las posibles soluciones.
Katherine Hempstead, Asesora Principal de Política de la Fundación Robert Wood Johnson habló que ha escuchado que la gente no consigue la atención que necesita y que los medicamentos muchas veces no son cubiertos totalmente en su costo.
Dijo que Medicare fue creado en 1965, por lo que acaba de cumplir 59 años de operación como una asociación federal y estatal para el acceso a la salud.
Informó que hay 82 millones de personas afiliadas al programa y que es la mayor fuente de seguro de salud en todo Estados Unidos con una filiación de ¼ de todos los niños y con la mayor cobertura para mujeres embarazadas, personas de bajos recursos, mayores y con discapacidades.
El programa en el 2012 fue expandido, pero para cada estado es opcional y muchos han optado por no expandirlo y eso crea una brecha de cobertura de 2 a 3 millones de personas, la mayoría de color que están en condiciones injustas dijo Hempstead.
Explicó que a ellos les preocupa que muchos no califican para Medicare porque su salario es demasiado bajo o demasiado alto del nivel de pobreza que se requiere para calificar y que eso significa que las familias tienen que mantenerse en la pobreza para poder acceder a Medicare.
Por otro lado mencionó que están comprometidos con el acceso a la salud para todos y cerrar la brecha de la cobertura de Medicare de la población no asegurada.
Para eso dijo que están financiando abogacía en los estados que no han expandido su cobertura de salud para los inmigrantes.
“Tenemos un proyecto en septiembre, va ser una calculadora que va enseñar el costo y beneficios de cubrir ciertas personas de la comunidad inmigrantes par que lo usen activistas y legisladores para que aboguen para expandir la cobertura, y reducir el número de cambios por la re-determinación del Medicare”, comentó.
Katherine Hempstead, Asesora Principal de Política de la Fundación Robert Wood Johnson y Martha Sánchez, Directora de Política Sanitaria y Defensa de la organización Jóvenes Invencibles.