Según la declaración de la Organización de las Naciones Unidas el 9 de agosto fue declarado como el Día mundial de los pueblos indígenas, es por esto que ese día entre las 15 y 18 horas se realizó una ceremonia oficial en las oficinas del Salón del Consejo Económico y Social de la ONU.
Las poblaciones autóctonas han buscado durante años el reconocimiento de sus identidades, su forma de vida y el derecho sobre sus territorios tradicionales y recursos naturales. Pero a pesar de esa férrea lucha a lo largo de la historia, sus derechos han sido siempre violados. Actualmente los indígenas se encuentran entre las poblaciones más vulnerables y perjudicadas, y es hasta ahora 11 años después de la declaración, que la comunidad internacional reconoce que se necesitan medidas especiales para proteger sus derechos manteniendo sus culturas y formas de vida.
Los pueblos indígenas son la base de la cultura nacional porque han contribuido a nuestro desarrollo con la aportación de sus conocimientos tradicionales aunado a la protección y conservación de sus recursos naturales, así también sus sistemas de organización y cooperación han sido copiados por asociaciones civiles y corporativos de negocios con mucho éxito.
En el discurso suena muy bonito pero en la práctica se nota una gran brecha entre las instituciones gubernamentales y los indígenas de las diferentes regiones y poblaciones, no solo en México sino a nivel internacional, y sobran ejemplos de esto.
Los indígenas desde la llegada de los españoles a la gran Tenochtitlan después de haber viajado desde el ahora llamado Puerto de Veracruz, han sido explotados humillados y sobajados amen de la explotación de la que son objeto, y solo son utilizados como carne de cañón en movimientos sociales, o como objetos utilitarios en épocas electorales.
Todos estos pueblos indígenas componen una gran diversidad, según informes de la ONU “existen más de 5000 grupos distintos en unos 90 países y hablan una abrumadora mayoría de las aproximadamente 7000 lenguas del mundo. Están constituidos por 370 millones de personas aproximadamente, es decir, más del 5% de la población mundial y, sin embargo, se encuentran entre las poblaciones más desfavorecidas y vulnerables representando el 15 por ciento de los más pobres”.
La pregunta obligada es ¿Qué se celebra el 9 de agosto? A los indígenas no les preocupan los discursos, lo que esperan es que lo que se ha asentado en el papel llegue a cumplirse a las comunidades, a sus pueblos, que la declaración de Libre Autodeterminación de los pueblos, se refleje en la práctica, que los dejen decidir sobre sus sistemas de gobierno o económico y sobre todo que les dejen de destruir sus recursos naturales por mineras que contaminan sus ríos y lagos y por empresas transnacionales que destruyen sus bosques.
A los indígenas les preocupa el cambio climático y muchos de ellos ya están trabajando por revertirlo pese a toda la lenta burocracia que retrasan sus planes y proyectos, sin embargo en las celebraciones abundan funcionarios, muchos de ellos nunca han pisado un pueblo o un camino entre el bosque, no han comido y convivido con los indígenas que no tienen la suficiente alimentación y diariamente son bombardeados con alimento chatarra.
En Oaxaca el Día Internacional de los pueblos Indígenas paso desapercibido, la Secretaria de Asuntos Indígenas (SAI), se preocupa más por asuntos políticos, y la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), carece de Delegado, sin embargo todos ellos solo se acuerdan de los indígenas en campañas y cuando comienzan a bajar recursos de los proyectos porque es cuando necesitan las firmas y autorizaciones de las autoridades indígenas.
Pese a eso, en los discursos abundan las palabras como las que declaro este día Antonio Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas, “En esta conmemoración anual, comprometámonos a hacer plenamente realidad la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, incluidos los derechos a la libre determinación y a sus tierras, territorios y recursos tradicionales.”
