- En los años 70’s las huelgas de los trabajadores era algo normal, de todos los años, pero hoy parecen ser extraordinarias, experto.
- Trabajadores quieren una mejor vida con buenos sueldos y mejores beneficios.
Los Ángeles, Cal.- El llamado “Verano laboral caliente” está llegando hasta la alcaldía de Los Ángeles, amenazando con paralizar la segunda ciudad más grande del país con un paro de más de 11 mil trabajadores que están luchando por un contrato laboral más justo desde enero.
Hoy mismo la alcaldesa Karen Bass defensora de la huelga de los escritores y actores de Hollywood emitió un comunicado indicando que “los trabajadores de la ciudad son vitales para el funcionamiento de los servicios que utilizan millones de angelinos todos los días y para nuestra economía local”.
Afirma que “ellos merecen contratos justos “ y que han estado negociando el contrato laboral con el sindicato SEIU 721 desde enero.
Y si el sindicato no llegan a un acuerdo, este martes 8 de agosto, los trabajadores públicos mantendrían una huelga de 24 horas.
Mientras las huelgas se acumulan en Los Ángeles, expertos en el tema que participaron en una video conferencia organizada por Ethnic Media Services el pasado 21 de julio indicaron que lo que estamos viviendo se ha convertido en el mayor momento de huelgas desde los años setenta.
Los Ángeles enfrenta los paros continuados de trabajadores de hoteles y restaurantes con demandas de mejoras laborales, que incluyen aumentos en suelos y mejores beneficios como el acceso al sistema de salud, entre otras peticiones.
Hace unos días el sindicato de United Parcel Services Inc. (UPS) alcanzaron un “acuerdo histórico” para evitar una huelga masiva que paralizaría el movimiento nacional.
Lucero Ramírez, trabajadora de un hotel de Los Ángeles dijo que sus razones para la huelga son un mejor pago para tener una vida mejor. A la trabajadora de limpieza le preocupa su pensión y seguro médico, aún más después de la pandemia, el tema de la salud para ella es sumamente importante.
Ramírez limpia cuartos de un hotel de 5 estrellas y para ella al igual que para sus compañeros su trabajo es muy desgastante físicamente debido a que tienen que limpiar a detalle pisos de mármol y alfombras sumamente caras. “Hay mucho vidrio en los cuartos y éstos tienen que estar nítidos, al 100”, afirmó Ramírez quien limpia 6 suites grandes por día.
Después de la pandemia dijo que los empleados tienen que hacer el trabajo de dos o tres personas sin ningún aumento de sueldo.
El pago que recibe la trabajadora cada quince días es de 1,500 dls., pero dice que no le es suficiente para pagar una renta de mil 100 al mes y pagar sus gastos de transporte, alimentación, etc.
“Mis compañeros no pueden pensar en moverse para tener mejor comodidad por los altos costos de la renta. Eso es un lujo, y es una lucha que tenemos y que está creciendo día con día”, dijo al indicar que ella particularmente está con miedo constante que su arrendatario le aumenten el costo de la renta.
Lo que está negociando el sindicato Unite Here Local 11, que representa a unos 30.000 trabajadores del sector hotelero, es mejores salarios, prestaciones médicas, cotizaciones al plan de pensiones y cargas de trabajo menos pesadas para los trabajadores, muchos de ellos inmigrantes.
Los contratos terminaron el mes pasado en más de 60 hoteles, que incluyen los Hoteles Hilton y Marriot.
Por su parte, los trabajadores de medios como televisión y cine de Hollywood están en huelga desde hace varios meses pidiendo también mejoras laborales y a su lucha se han unido artistas de la meca del cine.
Para Jorge Rivera, Vicepresidente del Comité de Escritores Latinx, WGAW/Guionistas y Productores de TV, dijo que existe un mito de que los que trabajan en la industria de Hollywood son millonarios, pero no, porque, no todos son Harrison Ford.
“Hay carpinteros, pintores, las personas que manejan los camiones, los parqueadores, peinadores y los de limpieza que no están ganando lo suficiente”, aclaro.
Dijo que son 160 mil miembros que ganan en promedio 26 mil dls por año y que no califican para seguro médico. “La gente debe entender que la industria del entretenimiento es una industria que necesita un seguro médico y es por lo que estamos luchando, para tener una carrera sostenible y pagos justos”.
Mencionó que hay estudios que indican que la industria del entretenimiento hace 200 billones de dls al año y que lo que piden solo les costaría un 2% de esa parte, pero que los estudios (las empresas), no aceptan sus demandas razonables.
Rivera tocó el tema de la Inteligencia Artificial (AI) la cual dijo que impactará a los escritores, actores y directores quienes se verían suplantados por esa tecnología.
Y aunque dijo que no cree que la AI pueda hacer el trabajo como un humano dijo que ya se está viendo que la AI está siendo utilizada en grandes producciones como Star Wars e Indiana Jones.
El representante de escritores Latinx, dijo que la AI tiene que usarse pero de forma regulada y con el permiso de los actores de usar su imagen.
El profesor Emérito de Geografía y Educación de UC Berkeley, Harley Shaiken quien empezó como obrero en una fábrica, se dedicó a la organización y, después, al mundo académico consideró que los trabajadores que están haciendo huelgas en Los Ángeles, actores y directores, están librando una batalla por todos los americanos y es vital que haya solidaridad con ellos.
Dijo que todos estamos siendo impactados y que las grandes ganancias de las compañías tienen que ser repartidas, porque al final estimularía el crecimiento económico.
De los sindicatos opinó que son vitales en una sociedad democrática con una economía saludable. “Y esto requiere que nos organicemos y aprendamos del papel de ellos”.
Comentó que tenemos que ver hacia delante y asegurarnos que las inversiones se hagan en compañías con buenos niveles de salarios y beneficios, no en aquellas de bajos sueldos donde utilizan el trabajo de presos y niños para la factoría de partes de carros eléctricos.
“Cuando decimos carros eléctricos no pensamos en qué hay detrás de eso, ¿cuál es el futuro de la esa industria? Porque ahora mírennos como estamos lidiando con miles de personas sin hogar por no hacer nada”, comentó.
El profesor Shaiken pidió solidaridad con los empleados y dijo estar preocupado porque los trabajadores tengan que dormir en sus autos o manejar dos o tres horas para llegar a sus hogares después de su trabajo.
La empleada Lucero pidió que “si saben que hay trabajadores bajo contrato que no vayan ahí ( a los hoteles en huelga). Pedimos que no se molesten con nosotros, solo queremos un mejor futuro, así como lo hicieron nuestras generaciones anteriores”, sostuvo.
Ada Briceño, Copresidenta de UNITE HERE Local 11 pido apoyo a los huelguistas, que la gente no cruce las líneas de piquetes y que marche con ellos.
“Va tomar tiempo, pero vamos a luchar juntos para asegurarnos que tengamos las ganancias que necesitan las familias”, dijo sobre la huelga de guionistas y actores de Hollywood.
La Senadora del Estado de California, María Elena Durazo, del Distrito 26 y ex dirigente sindical y primera mujer Secretaria-Tesorera de la Federación Laboral del Condado de Los Ángeles, AFL-CIO, participó en la conferencia mencionando que se tienen que ver las políticas de vivienda porque eso es lo que está tomando fuerza a través de las huelgas.
“Eso demuestra que no ganan lo suficiente para el pago de la renta y la hipoteca”.
Durazo narró que en los años 80 y 90’s hubo un renacimiento del movimiento laboral muy importante dirigido por trabajadores inmigrantes latinos que hablaban no solo del acceso a la salud sino de cambios en el sistema y que las organizaciones tenían que hacer los cambios para todos. “California no sería tan progresista sin esos movimientos “, admitió.
Nelson Linchtenstein, Profesor de Investigación en el Departamento de Historia de la Universidad de California en San Bernardino (UCSB), donde dirige el Centro para el Estudio del Trabajo, la Mano de Obra y la Democracia dijo que California siempre ha estado a la vanguardia y que en los años 70’s las huelgas de los trabajadores era algo normal, de todos los años, pero que hoy parecen ser extraordinarias.
“En los 40’s, 60’s y 70’s las huelgas pasaban todo el tiempo y eso mandaba un mensaje a los empleadores, sin que los empleados tuvieran o no Unión (Sindicato)”, dijo al comentar que los empleadores no querían que sus empleados se fueran a la huelga y por eso mantenían los pagos altos.
Explicó que ahora tenemos un mercado laboral ajustado y el desempleo bajo. Con un disgusto moral contra los empleadores luego de Covid-19.
Linchtenstein, comparó lo que está pasando ahora con los años 30’s, mencionado que en ese tiempo surgió el movimiento de Derechos Civiles.
Ahora dijo que compañías como Walmart, Mac Donald, y los Starbucks, se están resistiendo a los sindicatos a toda costa y con costos a su reputación, pero que eso es un reto que tienen que ser enfrentado.
Los sindicatos en los años 80’s comentó que eran corruptos. Ahora, solo el 6% del sector privado pertenece a sindicatos; siendo el porcentaje de americanos en sindicatos muy bajo. En el llamado Valle del Silicón, los trabajadores de esas grandes compañías no están sindicalizados, mencionó.
La Senadora del Estado de California, María Elena Durazo (izq.), Ada Briceño, Copresidenta de UNITE HERE Local 11 (centro) y Jorge Rivera, Vicepresidente del Comité de Escritores Latinx, WGAW/Guionistas y Productores de TV (der.).