*”Cuando se tiene un compromiso para subsistir, se puede vivir de esa disciplina”, afirma
Oaxaca de Juárez, Oax.-Jassiel Martí es un joven artista plástico autodidacta. Nunca tuvo ni ha tenido maestros.
Desde niño le decían que era muy creativo y “muy bueno” para el dibujo.
Como no había escuelas en el Estado de México donde creció, aprendió a dibujar a través de libros y desde entonces “ya no lo soltó”, comenta en su estudio en el Centro Cultural de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO), donde le han brindado un espacio para que desarrolle su creatividad.
Tenía 15 años de edad cuando comenzó a realizar dibujos para una revista de caricaturas de corte político- social denominada “Mochila al hombro”, y luego en otra titulada “De interés”.
Pero desde entonces “sentía que se encaminaba hacia algo más serio”. Había oportunidades y las aprovechaba, y así comenzó a perfeccionar su dibujo cuando cursaba la preparatoria.
Martí adoptó ese apellido en honor al político, diplomático, poeta, ensayista, periodista, filósofo, fundador del Partido Revolucionario Cubano y organizador de la Guerra de Independencia de Cuba, José Martí.
“Admiro a ese personaje”, dice el artista plástico que nació en la ciudad de México, pero “es oaxaqueño de corazón”.
“Cuando estudiaba en la preparatoria ví el oficio desde la perspectiva del trabajo y empecé a experimentar”.
“No era constante, pues pintaba una vez al mes, porque también tocaba en un banda de rock, pero nunca solté esa disciplina”, señala en entrevista.
Al paso del tiempo vio la pintura como una forma de vida y dijo ” quiero vivir del arte, pero de una manera más formal”.
Había quienes le decían que no se dedicara a esa actividad, pero también quienes le comentaban que ,” tiene el don del arte”.
“Creo que tengo la bendición del cosmos”, afirma Jassiel quien ha desarrollado las técnicas del acrílico, surrealismo y realismo mágico e impresionismo.
“El realismo mágico es rescatar la parte mística que tengo de la cultura mexicana, porque me ha atrapado todo lo relacionado con las leyendas”, expresa.
Cuando pinta no planifica, sino que trata que el arte surja y fluya.
Así, en el centro de la ciudad de Oaxaca observa a las parejas que se buscan, se abrazan y las plasma en su obra.
“Es que el amor se da en muchas formas, porque no tenemos estética para ello”. ” Somos seres bastante amorfos”, indica y, desde esa perspectiva empieza a experimentar en sus trazos, sin ponerles rostro a las figuras humanas.
Y, ¿se puede vivir de la pintura, del arte?
“Claro que se puede vivir de lo que a uno le gusta hacer, cuando uno tiene un compromiso para subsistir”, subraya.
Agrega: “en el arte haces tu proyecto, armas tu camino”.
Jassiel Martí ha expuesto su obra en galerías de la ciudad de México, Oaxaca, Monterrey, Querétaro, Veracruz, Estado de México, Ecuador, Colombia, Argentina, entre otros lugares.
En siete u ocho años de trabajo ha elaborado alrededor de 150 pinturas de forma autodidacta, “sobre la marcha, porque tiene un compromiso con el arte y aprovecha el don con el que nació.
