- Se calcula que la cifra puede llegar a los 7 millones señalan expertas, al revelar que la Unión Europea tienen contemplado un plan de permiso de 3 años.
- Estados Unidos tienen que trabajar más para usar su capacidad que tienen para los refugiados, porque mientras los estadounidenses apoyan darles la bienvenida, la resistencia es en la administración: MPI
Fotos cortesía/Manuel Ortiz, de Península 3060 Press
Los Ángeles, Cal.- Aunque por el momento la solidaridad de los países vecinos como Polonia, Alemania y otros de la Unión Europea hacia los refugiados ucranianos que huyen de la guerra contra su país se ha visto desbordada, depende de las políticas migratorias que se declaren ahora lo que determinará el futuro para los miles que cruzar.
Lo anterior fue revelado por Natalia Banulescu-Bogdan del programa internacional de Europa del Instituto de Política Migratoria (MPI por sus siglas en inglés) durante una videoconferencia organizada el pasado viernes 11 de marzo por Ethinc Media Services.
En esta conferencia participaron también el periodista Manuel Ortiz, de Península 3060 Press, que esta en la zona de batalla en Kiev, Ucrania, y quien dio una radiografía de lo que pasa en el terreno de guerra, así como la Presidente y Directora Ejecutiva de Lutheran Immigration and Refugees Services, Krish O’Mara Vignarajah, quien habló de como domésticamente en Estados Unidos se opera para admitir a refugiados que huyen de guerras.
Natalia comentó que algunas estadísticas estiman que más de 2 millones y medio de ucranianos han dejado el país. Un millón y medio en la última semana.
Explicó que muchos ucranianos se han movido a la Unión Europea desde el 2014, porque son personas de fuente de mano de obra, siendo que un 55% de los ucranianos reciben permisos migratorios.
También dijo que muchos de ellos van hacia Polonia, mientras que los estudiantes se adentran a la Unión Europea, lo que ocasiona que la gente ya tenga lazos familiares internacionales en algunas zonas.
La experta dijo que lo se ve ahora es el flujo hacia las fronteras principalmente de mujeres y niños, porque a los hombres de 18 a 60 años no se les deja salir del país. “Esto es muy diferente a otras crisis de desplazamiento”, comentó, al hablar que en otras crisis migratorias son los hombres que viajan primero, por eso considera que ahora cambia la percepción de la gente que los recibe.
Pero no solo gente de Ucrania son los que salen de ese país sino también lo hace la gente extranjera que vivía ahí, ellos gente de África, medio oriente, etc.
Aparentemente comentó que la evacuación se ha visto más fácil comparada con otros conflicto, al estar las fronteras abiertas de los países aledaños.
Los ucranianos “desde 2019 pueden viajar sin una visa biométrica, pero hay lugares donde no hay mucha protección y la preocupación es por los más vulnerables, incluso niños no acompañados”.
También dijo que hay preocupaciones por los estudiantes que no son de ucrania y de otras personas que han sido desplazadas y que no tienen documentos, porque ellos al no ser de ese país no califican para la protección temporal.
Natalia señaló que el Consejo Europeo determinó el pasado 4 de marzo que los ucranianos califican para la protección temporal hasta de 3 años con acceso a trabajo y servicios médicos, empezando por un año y luego sería extendido a 6 meses, para que las personas tomen la decisión de un retorno seguro cuando concluya la guerra.
Esto es una idea de lo que está haciendo en conjunto la Unión Europea, en lugar de que cada uno de los estados o países pudiera hacer, como el caso de los refugiados Sirios que en 2015 y 2016 tuvieron acceso a beneficios dependiendo del país al que llegaron, señaló.
A los trabajadores migrantes que no son ucranianos, pero que están saliendo de ese país, la Unión Europea los está admitiendo dentro de su territorio pero solo para que tengan un paso seguro hacia su país, aclaró.
En países como Canadá, Estados Unidos y Australia, han anunciado medidas para los ciudadanos de Ucrania que ya están en esos países para extenderles las visas y extender su reunificación familiar, en la que también se habla de grupos de auspicios privados.
Sin embargo, la escala de flujo de migrantes no tienen precedentes y países de Europa Central y algunos estados tienen menor capacidad, considera Natalia, al señalar que hay lugares de recepción que países han prometido, pero no parece satisfacer la cantidad de gente que se están viendo.
Los ucranianos no necesita visa por 90 días para entrar a la Unión Europea. Ellos pueden ir a donde decían ir, pero aun así se tienen que registrar para tener los permisos que ahora se están dando y es todo un desafío logístico con las grandes filas y con una capacidad de integración limitada, comentó.
Respecto a la pregunta sobre los estudiantes africanos que han sido discriminados a la hora de entrar a la Unión Europea, dijo tener todos los motivos para creer que esos informes son verdaderos pero cree que hay confusión desde el inicio sobre todo con la gente que no tiene pasaporte biométrico y se crean perfiles raciales.
Por eso dijo que organizaciones están observando que haya un tratamiento justo en los procesos.
Lo que prevé Natalia a largo plazo es que se está en una crisis, que viene de una crisis previa- la pandemia- y los países tienen una limitada generosidad con la gente refugiada. “Vamos a ver una perdida de apoyo de los refugiados en todo el mundo”, sostiene.
El periodista Ortiz del sitio web Peninsula 3060 Press, quien está cubriendo la guerra contra Ucrania desde Kiev, ratificó las imágenes que se han visto de gente haciendo largas filas para salir de la zona.
“Es difícil llegar aquí porque no solo hay gente que se está yendo, sino que hay gente que está entrando para pelear, traer medicina u otras cosas”, mencionó, al hablar de los ataques en la frontera de Rumania y de Polonia.
“Kiev considera la gente un lugar seguro pero esta mañana escuchamos las alarmas. La gente no habla mucho, camina en silencio. Hay mucha gente que viene de distintos lugares que les toma 30 horas de viaje porque las carreteras están destruidas y es mejor tomar el tren”, refirió.
“Cuando la gente llega van a un tren subterráneo. Hay un refugio especial de bunker”, dijo tras indicar que se puede sentir la tensión en el ambiente.
Sobre la comida comentó que sí la hay en Kiev, pero en otros lugares del país hay gente que pasa horas sin comida. “Hay restaurantes abiertos y mercados, muchos están cerrados, pero hay comida”, sostuvo.
Por otro lado, dijo que “hay mucho puntos de chequeo militar, con barricadas y tanques” y que en estos momentos en la ciudad no les preocupa Covid. “Yo era la única persona que usaba la mascara”.
“En Kiev la gente se pone en cola y quiere salir”, comentó, al estimar que el 60% de los que salen va con destino a Polonia y otros a Rumania.
“Hay colas de espera de 30 horas. Hay gente que tienen que estar horas en el camino y luego esperar; después de esto el autobús llega a la frontera, pero no en el frente, y tienen que caminar”.
El periodista confirmó que la mayoría de la gente que huye son mayores, mujeres, niños, adultos mayores y madres con 2 a 4 hijos que tienen que hacer fila de 3 a 4 horas para que les sellen sus documentos.
Ortiz vio también mucha gente discapacitada, pero también dice que hay grupos de estas gentes que se están quedando en el país porque no pueden hacer este duro viaje.
“En la mañana hablé con una pareja, que se quedó con sus padres porque no podían hacer este viaje tan largo”, dijo, al comentar que él no ha visto niños solos sino mas bien madres con niños que una vez que cruzan la frontera hay mucha solidaridad para ellos. “Hay gente que se organiza a través de las redes sociales. Vi voluntarios que llevan comida caliente”, refiere, al explicar que las condiciones climáticas son muy difíciles.
E indica que no es el gobierno, ni siquiera las organizaciones no gubernamentales, sino que es la gente quienes están ayudando a los refugiados. “La gente esta abriendo sus puertas. En aplicaciones como Arbin (renta de casas) la gente esta donando lugares”, comentó.
También señala que aunque se dice que las fronteras están abiertas para todos, los primeros que pasan son los ucranianos y luego el resto de las personas para quienes la espera es más larga de 5 a 6 horas, porque incluso no tienen pasaporte.
TPS en E.U. para los ucranianos refugiados
Krish O’Mara Vignarajah, presidenta y directora ejecutiva del Servicio Luterano de Inmigración y Refugiados (LIRS por sus siglas en ingés) dijo que Estados Unidos aprobó el pasado 3 de marzo su designación de Estatus de Protección Temporal (TPS) para Ucrania por 18 meses, protegiendo de la deportación a aproximadamente 75 mil ciudadanos ucranianos que ya estaban presentes en los Estados Unidos al 1 de marzo del 2022.
Dijo que los ataques que se están incrementando y que se están viendo van a crear un éxodo de gente mas allá de las proyecciones de 4 millones y que podrían llegar a ser de 7 millones.
Por lo que sostiene que es importante que Estados Unidos se involucre de manera más fuerte con un programa de refugiados que, ya existe desde 1980 y que tiene la capacidad pero, requiere de bastante trabajo.
Y aunque se han aprobado 13 mil 600 millones de dls para brindar servicios como refugio, alimentación, agua, no se debe asumir que todas las personas que se han ido de su país van a querer venir, sino que se van a otros donde tienen más lazos como Polonia y Alemania, señaló.
Para el año fiscal, dijo que el límite de refugiados es de 125 mil, pero por ahora se han recibido 6 mil 500. Bajo la administración de Trump este programa había bajado a 15 mil.
“Los estadounidenses apoyan darle la bienvenida a los refugiados, donde hay resistencia es en la administración”, comentó.
Por la entrada de México dijo que se están viendo bajos números de los que tratan de venir por la frontera Sur. Señalando como ejemplo el caso de la mujer ucraniana con sus 3 hijos que recientemente la dejaron entrar y no de inmediato por el problema con el Título 42, que inicio con Trump y que hace esperar a las familias que buscan refugio en territorio mexicano.
Por eso organizaciones como la suya quieren que se termine el Título 42.
Vignarajah, reconoció que hay preocupaciones por las posiciones políticas porque algunas personas sugieren y dicen que esta administración tienen políticas abiertas en cuanto a la migración y dicen que están dejando entrar a mucha gente, pero explicó que se tienen que tomar decisiones urgentes para la gente de ucrania y otras consideraciones para otras personas que buscan refugio.
Natalia también dice que hay preocupación de la capacidad de bienvenida y que está en todos lados, cuando el flujo migratorio que está entrando es grande.
Por lo que señala que se debe asegurar que no se estanque las lista de espera tanto por la gente que está esperando, que está en línea para obtener otros tipos de asilo, como por los grupos a los que se les quiere dar la bienvenida.
Ahora dijo que hay un esfuerzo bipartidario; siendo los demócratas, en mayoría, para los fondos, mientras que en otros años, en el 2015, 31 gobernadores hablaron contra los refugiados Sirios. Este contraste con los refugiados Afganos, 37 estuvieron a favor y 2 en contra.
Para Natalia ningún desplazado quiere salir de su casa y cuando más largo sea este desplazamiento es más difícil que la gente contemple regresar independientemente en qué condiciones van encontrar sus países y cómo lo van a poder reconstruir para que esos millones de personas puedan regresar fácilmente.
