HomeOaxacaPeriodistas oaxaqueños no creen en sus organismos de protección

Periodistas oaxaqueños no creen en sus organismos de protección

Oaxaca, Oax.- Octavio, es un fotoreportero oaxaqueño que fue víctima de agresiones de pobladores de Santa María El Tule por hacer su trabajo durante un incidente en que se detenía a un presunto ladrón.

Como él, muchos de sus colegas no creen en los organismos gubernamentales que se han creado para la protección de sus derechos humanos.

El 3 de agosto pasado se creó una Fiscalía para Atención a Agresiones a Periodistas en Oaxaca, debido a la alza en las agresiones que han sufrido este gremio.

Al momento de su creación, este organismo recibió 67 expedientes previos y actualmente cuenta con 85, es decir, a cuatro meses de su creación han recibido 18 casos más.

De esos expedientes se desprenden 37 denuncias por amenazas, 4 contra la libertad de expresión, 11 por lesiones, 7 por abuso de autoridad, 3 por homicidio que se llevaron a cabo y 23 indeterminados -que significa que se inician por el delito que se configure durante el proceso-.

Lo anterior fue dado a conocer por Jorge Alberto Flores Sánchez, de la Unidad Especializada para la Atención a Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca, quien revela que el delito de amenazas, se instituyó en la legislación oaxaqueña a mediados del año pasado.

Los registros que manejan de delitos contra la prensa oaxaqueña –carpetas de averiguaciones previas y legajos de investigación- los tienen registrados del 2012 a la fecha, comentó el funcionario.

Explicando que han concluido con 13 carpetas o casos por abstención de investigar o no ejercicio de acción penal. “Esto significa que en algunos no existía delito, otro porque hubo desistimiento de querella, otros porque no había querella. Ahí fueron varios los rubros en los cuales se analizó y se determinó que en esos asuntos no iban a prosperar. No iba haber un resultado satisfactorio, porque consideramos que cuando se inicia un tramite lo correcto es decirle (al agredido) que ese trámite aquí no corresponde o aquí no va a prosperar, por éstas razones”.

Respecto de la agresión a fotoperiodistas por pobladores del Tule, el funcionario mencionó que fue cerrada la carpeta (caso) porque las partes llegaron a un acuerdo.

Octavio, junto con Ernesto, Edgar y Oscar fueron esas víctimas de la ira de los pobladores de Santa María El Tule, población localizada a tan solo 10 minutos de la ciudad y conocida por su afluencia turística que visita al conocido como el árbol más grande, en volumen, del mundo.

Según relata Oscar, fotoperiodista de un reconocido diario local, estaba cubriendo la detención de un ladrón, pero cuando gente de la comunidad lo sacaba de un domicilio donde se había refugiado, al momento de capturar las fotos del presunto ladrón y del momento, “la gente se vino en montón y nos dijeron que no podíamos grabar, pero no con palabras sino a golpes, en ese momento a mí me ahorcaron, nos quitaron los teléfonos, me arañaron y nos intentaron quitar otros objetos de trabajo”.

“A mí me quitaron además la cámara. En la cámara no solo había fotos del momento sino todo el trabajo del día. En ese momento Edgar solicitó el apoyo de la Policía que estaba en el lugar, pero la Policía Estatal nunca quiso intervenir, más bien nos recriminó y textualmente dijo “que para que se metían en broncas,” la agresión de los pobladores fue sin advertencia de por medio, solo empezaron a gritar: ¡Aguas están grabando, están grabando!, la gente enardecida quería que borráramos las fotos y videos y aunque ya lo habíamos hecho, en su falta de conocimiento de los aparatos creyeron que no había sido”.

“Durante la agresión sufrimos daños, como las perdida de las tarjetas de memoria, el celular, y daños en mi persona, como ya había dicho, me arañaron, me intentaron ahorcar, sintiendo falta de aire casi perdiendo el conocimiento, pero sin llegar a eso, las uñas clavadas en todo el cuerpo, en la cabeza me sacaron sangre, y material en el caso mío solo fue el teléfono y las memorias de la cámara, información que ya no pude rescatar”.

Aunque se llegó a un acuerdo con el presidente municipal de El Tule, Octavio vive la incertidumbre y la preocupación, es cierto –dice- que ya se realizó la disculpa pública y la reparación del daño material, aunque comenta que eso es lo menos, la intención no era sacar provecho del momento, ni hacerse mártires para tener ganancia material.

Lo que le preocupa más es que durante la agresión le tomaron fotos a él y a su identificación del IFE, “se quedaron datos míos, porque los pobladores que realizaron mayormente mujeres y niños, una chava me tomaba fotos a mí y a mis identificaciones, y me amenazaban diciéndome que `me iban a buscar y de que me iba a cargar la chingada`”.

Comenta que siente que en Oaxaca no existe la protección para los periodistas. “No me siento satisfecho más bien me siento preocupado, porque si le tomaron fotos a mi credencial de elector, y luego me dijeron que me iban a buscar. No estoy satisfecho, más bien vivo con la incertidumbre de saber si van a venir o no”.

“La disculpa pública es una mínima parte, pero hace falta más, porque no sé quién me tomó las fotos, y no sabes qué va a pasar, si ya saben a qué horas sales, a qué hora llegas en donde trabajas, por lo cual he hecho diferentes cambios y medidas auto protectoras: voy a instalar cámaras de vigilancia en la casa, he platicado con mi esposa y mi familia, para que estén atentos a cualquier extraño o cambio que noten, y he conocido mejor a los vecinos; coordinándome con ellos para que me apoyen cuando yo no esté en casa”.

Refiere el fotoperiodista que no realizaron ninguna queja ante Derechos Humanos porque no les ha dado confianza en los asuntos que han conocido, y que seguirá en este oficio, que a pesar de ser peligroso, le gusta mucho, y que no se va a esconder por lo sufrido, más bien, seguirá adelante con algunos cambios en sus acciones laborales, “porque como quedó estipulado en el acuerdo: esta población no recibirá cobertura a ninguna de sus actividades por parte de la prensa local, por ser un pueblo agresivo con la prensa”.

El físcal, Jorge Alberto Flores Sánchez.
RELATED ARTICLES

Most Popular

Recent Comments