Los Ángeles, Cal.- Más de 20 mil piezas de pan de muerto y de yema fueron distribuidos a casi toda la Costa Oeste tan solo en la pasada temporada de celebración de los Muertos por El Valle Oaxaqueño, propiedad de Arturo Aguilar.
Desde dos semanas antes de la celebración del Día de los Muertos, el empresario oaxaqueño se declaró listo para surtir el codiciado pan oaxaqueño.
Aguilar, dijo que su equipo de panaderos inició a preparar pan para enviar a Fresno, Oxnard, San Francisco, y a varias ciudades de los estados Oregón y de Washington.
“También tenemos otros pedidos foráneos muy grandes como a comerciantes de Las Vegas y otras ciudades de Utah, y de muchos condados de California”, dijo. “Si te digo que vamos a preparar 20 mil piezas de pan, es poco. Nuestra capacidad para preparar pan es mas, serán mucho más que esa cantidad, es imposible decir una cantidad porque son de varios tamaños”.
La receta del Pan de Muertos tiene muchas variedades, dependiendo de los estados, pero el de El Valle Oaxaqueño se caracteriza porque se trata de una receta secreta de familia que data desde la época de los abuelos de Aguilar.
“Cada lugar en México tiene su variedad de Pan de Muerto, de hecho, cada región de Oaxaca tiene la suya, y bueno, de mi región, el Valle, también hay variedad.
“No puedo decir que mi receta es la original o la auténtica porque el cliente es el que decide qué pan le gusta. Si vamos a Oaxaca, hay diferente tipo de Pan de Muerto, diferente sabor y diferente textura. Pero la receta que tenemos nosotros viene de mis abuelos, es familiar”, especificó. “Cuando se habla de auténtico, no sé cuál es el auténtico, lo que sí es el auténtico es el nombre de pan, que puede ser de yema u otro tipo”.
Sin jactarse, Aguilar dijo que muchos panaderos han trabajado en El Valle Oaxaqueño y ahora trabajan en otros negocios, pero no han logrado igualar el sabor del Pan de Muerto.
“Tenemos la bendición de que el cliente regresa con nosotros”, expresó. “Pero a mí no me gusta ser envidioso, de todo corazón deseo que Dios bendiga a todos los que se dedican al pan durante esta temporada porque han sido meses muy difíciles”.
El Pan de Muerto es un pan ceremonial que se prepara en México para conmemorar el Día de Muertos o de Todos los Santos, celebración que tiene lugar los días 1 y 2 de noviembre, aunque dependiendo de la región puede empezar desde el 28 de octubre y durar hasta una semana.
La tradición es colocar el Pan de Muerto en los altares que cada familia construye en honor a sus queridos difuntos como ofrenda, entre otros alimentos que eran los favoritos del honrado.
PAN DE MUERTO
Como era de esperarse, Aguilar no compartió el ingrediente secreto que caracteriza el sabor que tiene el pan que elaboran en su panadería y que pronto será deleitado por millares de personas que comparten el bizcocho junto a sus “muertitos” chopeándolo con chocolate.
Con una sonrisa bajo el cubrebocas, el empresario dijo que entre los ingredientes base del Pan de Muerto es harina, huevo, mantequilla, manteca, azúcar y sal.
“Y el ingrediente secreto que tenemos y es el que nos identifica”, dijo de buen humor.
Para el decorado del pan, dijo que lo único que trae de Oaxaca son las caritas hechas con unos meses de anticipación por artesanos del sureño estado mexicano.
Explicó que el Pan de Muerto lo adornan con ajonjolí y caritas en forma de rostro humano, ángeles o calaveras.
“Son un detalle especial que caracteriza el Pan de Muerto de Oaxaca”, dijo. “Las caritas están hechas de harina y pintura vegetal en forma de rostro humano representando a los difuntos”.
Aguilar dijo que en su negocio, que además de panadería, tiene todos los productos que se requieren para construir un Altar de Muertos y los alimentos de las temporada como chocolate, cacahuates, ajonjolí, flores, caña, entre otros.
