Washington, D.C. – En la madrugada del miércoles, miembros del Caucus Hispano del Congreso (CHC por sus siglas en inglés) presentaron más de 100 enmiendas a la traición presupuestaria republicana, un proyecto del ley que al cual el CHC se opone por los impactos crueles, torpes y peligrosos que tendrá para las familias trabajadoras, los inmigrantes, los ancianos, estudiantes y comunidades vulnerables por todo el país.
Desde arrebatar asistencia alimentaria y apoyos para la vivienda asequible hasta desmantelar inversiones de energías limpias y poner en peligro el acceso a la salud, el presupuesto republicano no es más que una traición al pueblo americano. Las enmiendas del CHC buscaban corregir esas fallas y presentar un camino hacia adelante con base en la equidad, seguridad, dignidad y justicia económica.
“Nuestras enmiendas son una respuesta directa a un presupuesto que le da la espalda a las familias inmigrantes, que recorta beneficios alimentarios y de salud para los más vulnerables y que beneficia a los ricos a expensas de los demás,” dijo Adriano Espaillat, presidente del CHC. “Estamos luchando por un presupuesto que asegure la seguridad de nuestros hijos y comunidades, uno que da prioridad a las familias trabajadoras – no a los billonarios. Esta no es una batalla de políticas públicas – es una lucha por el alma de este país.”
Los republicanos alargaron su última junta de comité para aprobar su traición presupuestaria en la obscuridad de la madrugada – un intento vulgar de infiltrar su estafa fiscal a escondidas del pueblo americano. El CHC luchó en contra de su engaño a cada paso, al frente de una lucha de 29 horas, ofreciendo enmiendas que podrían reducir el dolor que los republicanos buscan imponer a los más vulnerables.
Las enmiendas del CHC reflejan una visión valiente y amplia para un país más justo, incluyendo:
- Proteger a los niños inmigrantes y sus familias prohibiendo redadas de ICE en las escuelas y centros de culto, prohibiendo la deportación de niños con enfermedades graves, y ampliando los beneficios estudiantiles para beneficiarios de DACA.
- Protegiendo la seguridad alimentaria eliminando los recortes propuestos a SNAP, preservando la asistencia nutricional para ancianos y familias y renovando el Thrifty Food Plan para reflejar el costo verdadero de los alimentos.
- Defendiendo la seguridad pública bloqueando regalos al cabildo de las armas de fuego y apoyando herramientas de supervisión como cámaras portátiles para agentes de migración.
- Preservar el acceso al cuidado de la salud eliminando cláusulas que buscan desmantelar el Affordable Care Act y recortar Medicaid.
- Invertir en energías limpias y justicia ambiental defendiendo créditos fiscales para los hogares con mayor eficiencia energética y encaminando subsidios de los hidrocarburos a infraestructura con resiliencia climática.
- Promoviendo la vivienda asequible a través de créditos fiscales para compradores de bajos recursos y primera generación.
- Apoyando los derechos de los trabajadores y la soberanía tribal defendiendo las negociaciones colectivas, asegurando prácticas laborales justas en la FAA y fortaleciendo el sistema de consultas con tribus en proyectos de infraestructura.
- Asegurando que los billonarios paguen su parte debida con un nuevo impuesto mínimo para los americanos ultra-ricos.
- Enfrentando los delitos de odio con una inversión federal de $500 millones en protecciones anti-odio y de derechos civiles.
Esta propuesta todavía no es una ley – ahora va al Senado. El CHC se mantiene fuerte en su compromiso con las familias trabajadoras, los inmigrantes y las comunidades de color – y continuaremos usando toda herramienta legislativa a nuestra disposición para luchar en contra de este ataque presupuestal.