sábado, diciembre 21, 2024
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Persiste temor y desconfianza en las vacunas contra el Covid 19 en la población LGTBQ latina

  • Sigue la lucha contra el coronavirus.
  • El sistema de Salud debe estrechar más los lazos con la comunidad.

Los Ángeles, Ca.- Para Bella Marín, una chica transgénero, su temor y desconfianza en la vacuna contra el Covid 19 es mucho mayor que cualquier ventaja de salud que ésta pueda ofrecerle.

También expresó que ya le dio 4 veces el coronavirus, la primera al comienzo de la pandemia en el mes de junio, ocasión en la que se sintió muy mal con dolor en el cuerpo, fatiga – que caminaba y se cansaba-, dolor de cabeza y tenía su respiración muy corta, esos malestares le duraron 3 meses.

“¡No creo en la vacuna!” Dice Bella al explicar que a sus parientes la vacuna les dio reacciones muy fuertes y ella no quiere experimentar eso porque hace cinco años sufrió un derrame cerebral y por lo tanto cree que es malo para su salud, además agregó que las siguientes 3 veces que le dio Covid los malestares fueron leves en comparación con la primera vez.

“Simplemente cuando tienes problemas de la sangre, es cuando te hace mal las pastillas, te hacen coágulos, y pienso que la vacuna va ser lo mismo”.

Bella Marín, es su nombre actual pero cuando nació en Guerrero, México se llamaba Fredy y cuando tenía la edad de 9 años se empezó a vestir como mujer, pero fue cuando tenía 17 años que llegó a Estados Unidos con su mamá, hace más de 20 años.

Dijo que su último trabajo fue hace 5 años en una compañía de plantación en Santa María, California, donde sembraba brócoli, lechuga y otras verduras.

Aseveró que por su condición de persona transgénero sufría mucho de discriminación, rechazo y le hablaban feo, lo que derribó en un altercado con su mayordomo que le provocó un derrame cerebral que la dejó postrada en una silla de ruedas.

Indicó que presentó una demanda contra la empresa y la ganó, logrando llegar a un acuerdo monetario, pero agregó que en menos de un año se le acabo el dinero sin que pudiera recibir atención psicológica. Y aunque tiene MediCal completo dice que por su condición no le ha servido de nada porque sufre de discriminación en las clínicas y hospitales por su género.

“Muchas veces me dejan horas en el hospital general, hasta el otro día me atienden sin que me den una cobija en la cama”, mencionó Bella, pero eso no es todo agregó que en la clínica donde se atiende recibe mal trato y prueba de ellos es que tiene dos años pidiendo un examen físico y no le hacen caso, además de que siempre la dejan al final de la fila para atenderla y los doctores no hacen nada por la presión alta que la aqueja. “Siento que me niegan todo”.

“Hasta grabaciones tengo de que no me atienden en el hospital y de cómo me tratan y siempre me ponen excusas”.

“Yo pienso que por ser transgénero no me atienden. Los doctores van y vienen y ahí me dejan sin atenderme”, se quejó.

Bella aseveró que los doctores de la clínica donde asiste le preguntan que si la pueden inocular contra el Covid 19, pero siempre les dice que no porque los médicos tampoco le explican si la vacuna contra el coronavirus es buena para su salud o no y es por eso que no se la ha puesto.

La doctora y profesora de la Escuela de Medicina de UC Irvine Candice Lucas-Taylor afirmó que los profesionales de la salud debe buscar un mayor acercamiento y reuniones con las poblaciones minoritarias porque todo lo que ha ocurrido en el pasado las ha impactado fuertemente.

“Han ocurrido muchas cosas que han impactado en la habilidad de nuestras comunidades para confiar realmente en nuestro sistema de salud, en la ciencia, en la medicina y eso nos ha atrapado en la forma de que es nuestra historia”, expresó. “Realmente tenemos que reunirnos con nuestras comunidades y disculparnos por los que el sistema de salud les ha hecho en el pasado e incluso ahora, y también hay que reconocer las inequidades que existen”.

Entrevistada después de recibir un reconocimiento por su amplia trayectoria en el campo de la medicina en el Theatre Hall de la UCLA durante el Día Nacional del Doctor, Lucas-Taylor dijo que no solo existen barreras como el idioma porque el inglés no es el primer lenguaje de las comunidades minoritarias como la latina, la coreana, la china y la japonesa sino que también tienen que enfrentar la discriminación.

Recalcó que para mejorar el acceso al cuidado de la salud y a las vacunas para los latinos y a la población LGTBQ es necesario establecer mejores comunicaciones y apoyos para construir la confianza en el sistema y en las vacunas que realmente son invaluables porque salvan vidas.

La doctora también afirmó que para dar mayor información sobre las ventajas de las vacunas el sistema de salud está trabajando con diversas organizaciones locales para tratar de promover la información correcta y la confianza en la población y consideró que la pandemia es una oportunidad para que ambos trabajen juntos en forma más estrecha por el bienestar de la población y enfrentar mejor los problemas de las minorías.

Consideró que la pandemia del Covid 19 le dio una nueva visión de la realidad a todos y reveló las inequidades que hay y que impacta a todos, en especial a las comunidades de color donde el índice de muertes creció de forma desproporcionada, agregó que eso resalta aún más el valor de la vacuna porque es efectiva y ayuda a prevenir muertes y la propagación rápida de la enfermedad, lo cual calificó como algo muy poderoso.

El supervisor de Programas para el VIH en Altamed Tony Díaz – Luján dijo que el hecho de que la comunidad LGTBQ sea la mayormente afectada por el Covid 19 se debe a que no tenemos la información correcta o apropiada de lo que es el tratamiento del coronavirus y también al estigma que existe en la población latina en general.

“Nunca nos comunicamos, siempre es el tabú en relación a que si hablamos de una enfermedad o de transmisión sexual por lo regular es siempre lo que pasa entre las familias latinas”, recalcó. “También creo que muchas veces la comunidad LGTBQ es un poco cerrada con los parientes o los padres en relación a hablar de temas de ellos mismos”.

De acuerdo a cifras de la Oficina del Censo el estado de California tienen la mayor población de lesbianas, gays, bisexuales y tansexuales con 2,7 millones.

Para combatir la desinformación y la falta de confianza en las vacunas del Covid, Tony Díaz comentó que debe haber más comunicación entre la familia así como acceso a la información de diferentes organizaciones como Altamed o Bienestar las cuales pueden proveer servicios directamente a nuestra comunidad.

“Como dije antes a veces en la familia no se habla de ciertos temas porque hay ciertas barreras, mitos, entonces creo que la oportunidad, la solución a eso son los talleres informativos o acudir a los diferentes centros de atención a la salud para que las personas puedan obtener información correcta de lo que en realidad sucede”, resaltó. “Porque a veces como latinos en general y no solo la comunidad gay siempre estamos adquiriendo información nada adecuada, me refiero a que por ejemplo siempre la mamá es lo que le dice la comadre que está pasando”.

“Siempre existen las barreras y el estigma en la comunidad de que somos inmigrantes y pensamos ¡oh! No somos las personas que podemos adquirir esos servicios porque no tenemos los documentos legales para eso”, mencionó Tony Díaz. “También el lenguaje por ejemplo Ahora Altamed está trabajando con la población oaxaqueña y a veces el español no es el idioma que hablan sino un dialecto zapoteco o mixteco y no sólo eso también existe el problema de la transportación”.

Recalcó que para combatir todas esas barreras en Altamed se realizan campañas y talleres informativos para incentivar a la gente a vacunarse contra el Covid.

Subrayó que el hecho de que las personas sean inmigrantes y reciban servicios de salud no va a ser motivo de deportación o para que después puedan arreglar su situación migratoria.

Díaz dijo que muchas personas no quieren ponerse la vacuna porque piensan que no son buenas y no son efectivas porque se hicieron en poco tiempo siendo una enfermedad nueva y eso ha hecho que algunas personas tengan temor, algo en lo que contribuyó la desinformación que surgió en las redes sociales.

En lo anterior también coincidió el educador de Salud en el área de Covid de la organización Bienestar, Mauricio Bernabé, quien dijo que para combatir el miedo generado por la falta de información adecuada, la organización que representa participa en ferias de salud, realiza campañas informativas y foros comunitarios vía Facebook o zoom donde le aclaran a la gente que no se les pide ninguna documentación para recibir la vacuna, que solamente tienen que hacer una cita.

Comentó que a la población latina y a la comunidad LGTBQ, la pandemia del Covid 19 les ha afectado más en lo emocional y en su salud mental porque las personas se aíslan, entran en depresión y sufren problemas de ansiedad.

Bernabé también informó que las personas que sufran de discriminación o malos tratos por parte de profesionales de la salud puede acudir a la organización Bienestar para que le ayuden y agregó que tienen el derecho a presentar una queja ante las autoridades.

Bienestar surgió en el Sur de California en 1989 para dar atención médica, tratamiento y prevención del VIH/SIDA, salud sexual y mental, asesoramiento sobre el uso de sustancias y tratamiento asistido con medicamentos a la comunidad LGBTQ+ y Latinx, y hasta el momento han dado información a más de 5 mil miembros de su comunidad sobre la vacuna de Covid 19 y su tratamiento.

Bernabé recordó que aunque la emergencia se terminó el día último de marzo, en el condado de Los Ángeles los residentes aún pueden obtener las pruebas del Covid, las vacunas y el tratamiento médico gratis.

Para concluir Bernabé exhortó a las autoridades y a los medios de comunicación a dar una mayor difusión de que esos servicios seguirán siendo gratuitos en el condado angelino para que más gente pueda beneficiarse de eso y a que den una mayor información al respecto.

Más información sobre Bienestar ir al sitio web: https://www.bienestar.org/es/

La doctora y profesora de la Escuela de Medicina de UC Irvine, Candice Lucas-Taylo y el supervisor de Programas para el VIH en Altamed, Tony Díaz Luján.

Mauricio Bernabé, educador de Salud en el área de Covid 19 de la organización Bienestar.

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