*El racismo una barrera para que los padres hispanos se involucren en las escuelas de sus hijos
* Más de 800 libros únicos están siendo retirados del acceso de los estudiantes en las escuelas poniendo en riesgo la formación de ciudadanos reflexivos y comprometidos.
Los Ángeles, Cal.- Maestros están dejando su profesión y ahora el país se enfrenta a una escasez de profesores a consecuencia de los bajos salarios, retos de la pandemia y otras causas que los alejan cada vez más de las aulas. Se estima que 233 mil mentores abandonaron su profesión durante la pandemia y no han vuelto.
Muchos de los estudiantes ya comenzaron las clases en medio de grandes retos, no solo el que no haya profesores de matemáticas o ciencias en 41 estados del país o que se enfrenten a que no tienen un consejero estudiantil para seguir su camino a la Universidad.
Sino también padres latinos se enfrentan al racismo y barreras lingüísticas que hace que no se involucren en las escuelas de sus hijos, dijo Evelyn Alemán, fundadora de la organización Nuestra Voz: Comunidades para Educación de Calidad, durante una video conferencia organizada por Ethnic Media Services el pasado 18 de agosto.
Dijo que su organización trabaja con padres latinos e indígenas y que el racismo es uno de los problemas que enfrentan los padres quienes le han dicho que incluso que han sido tratados mal porque no hablan el idioma.
“Muchos padres sienten eso y el clima es importante porque no se sienten bienvenidos o invitados y la escuela es parte de la comunidad, donde los niños pasan mucho tiempo, pero los padres no quieren decir nada, tienen miedo porque temen represarías contra sus hijos”, mencionó.
Explicó que esto sucede en todas las escuelas no solo en la USDA, sino también en las escuelas chárter.
Alemán comentó que una madre le contó llorando su experiencia con un mal trato que recibió en la escuela de sus hijos. “Ellos no se merecen ser mal tratados”, apuntó.
Por otro lado, señaló los problemas que enfrentan las escuelas con mayoría de latinos en las que no solo no tienen suficientes recursos, ni personal, como por ejemplo citó que hay un solo concejero trabajando para 600 u 800 estudiantes lo que ocasiona que los graduados no sepan como continuar la Universidad.
El Dr. Tuan Nguyen, profesor adjunto de la Facultad de Educación de la Universidad del Estado de Kansas habló de la escasez y los retos que hay para mantener a los maestros en las aulas.
“Sabemos que los profesores son fundamentales para el aprendizaje de los alumnos”, indicó.
Dijo que la respuesta de algunos estados ha sido la disminución de requisitos para ejercer como maestros y sustitutos y han usado a maestros retirados e incluso la Guardia Nacional para cubrir la brecha originada no solo por la Pandemia sino por otros motivos.
Comentó que hay muchas vacantes en todo el país siendo el Sur de Florida donde hay más con 4 mil puestos a partir del 2021 al 2022, así como Misisipi, Alabama y Georgia donde tienen más de 3 mil puestos vacantes. En total hay al menos 36 mil 500 puestos vacantes en todo Estados Unidos.
Nguyen quien ha trabajado en una investigación de datos sobre el tema de la escasez de profesores dijo que hay dos asuntos importantes que son la oferta de profesores y la capacidad de retenerlos año con año.
Y explicó que en los últimos años ha habido una disminución sustancial en el interés de las personas en convertirse en maestros, indicando que 700 mil personas se matricularon en programas de preparación de profesores en los años 2009 al 2010, bajando las cifras a menos de 40% en 2015 al 2016.
Comentó que en el 2010 el programa de maestros que están certificados para enseñar alcanzaron su punto máximo y desde esa fecha han disminuido cada año, así que el número de personas que quieren ser profesores está disminuyendo y de los que están preparados también, agregó.
El profesor asistente dijo que lo peor es para los maestros STEM (ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas) que solo hay alrededor de 32 mil profesores que están certificados para enseñar esas materias y que cada año hay un descenso sustancial en su oferta.
Nguyen indicó que a nivel nacional, en promedio, alrededor de 8% de los profesores abandonan su profesión cada año aumentando la cifra después de Covid. Hay lugares como Alaska que llega a 22% y otros hasta el 100%.
“Ese es un enorme, enorme problema al que se enfrenta la educación ahora mismo”, opinó.
Factores como bajos salarios, el que los maestros hayan visto que su profesión no es tan estable con la pandemia, así como tener dos o tres trabajos para llegar a mes son la claves.
Después de la pandemia, ahora los profesores se están dando cuenta de que muchos de sus distritos y escuelas no les están proporcionando las condiciones laborales que necesitarían para prosperar. Se les pide que den demasiadas clases. Se les pide que asuman demasiadas responsabilidades adicionales, mencionó.
“Y para algunos de ellos, incluso tienen que trabajar en un segundo o tercer empleo para llegar a fin de mes. Así que eso hará que la gente abandone la profesión”.
Aleman de “Our Voice” dice que los padres inmigrantes muchas veces indocumentados entienden que los trabajadores de la educación deben tener salarios justos.
Mas de la mitad de las escuelas públicas son ocupadas por familias con hijos latinos, comentó.
California es uno de los estados que está perdiendo muchos estudiantes desde la pandemia, se calcula que 250 mil estudiantes están estudiando en casa o escuelas privadas.
Otro frente que libran los estudiantes es que los estudiantes se enfrentan a un entorno cada vez más polarizado, ya que los padres y los políticos intentan remodelar los planes de estudio y las bibliotecas escolares.
El Dr. Shaun Harper, Profesor rector de la Facultad de Educación Rossier de la Universidad del Sur de California (USC) y de la Escuela de Negocios Marshall dijo que no todos saben lo que está pasando a nivel nacional con la prohibición de libros que incluyen a personas y familias LGBTQ en muchos distritos escolares de E.U.
Explicó que un buen clásico “Tony Morrison” y otros han sido retirados de las estanterías de las bibliotecas escolares y públicas, así como libros de influyentes indígenas y otros autores de color cuyos libros están siendo prohibidos en todo el país.
Al menos 44 estados han introducido proyectos de ley desde enero del 2021 que han tenido como objetivo prohibir la teoría crítica de la raza, a pesar de que la teoría crítica de la raza no se enseña en las escuelas K-12, afirmó.
Y dijo que esto ha sido utilizado como un “boogie man” para conseguir que los miembros de los consejos escolares, realmente asustados, prohíban estas cosas, “pero no es sólo la TRC propiamente dicha sino que también son esfuerzos para que no se enseñe sobre el pasado racial de América y el presente”. En 18 de esos estados la legislación ha sido aprobada.
Dijo que incluso en estados progresistas como California, en juntas escolares locales, hay debates sobre la enseñanza de la raza y lo mismo está ocurriendo en la educación superior.
Además de la enseñanza acerca de la raza, muchos estados también han puesto restricciones al gasto de fondos públicos.
Sin embargo, Harper indica que la raza es un tema tabú en las escuelas y que muy probablemente los mentore no están hablando a los niños de esos temas.
“No queremos incomodar a la gente o decir algo equivocado y en última instancia como adultos no hablamos de raza entre nosotros, en nuestra escuela, porque no sabemos cómo hacerlo”.
“Nunca aprendimos a hacerlo en nuestro programa de formación de profesores ni en nuestro programa de certificación de directores”, argumentó al afirmar que tanto profesores como líderes escolares aprenden muy poco sobre raza y racismo en las Universidades y escuelas de educación.
Harper dice que en el Centro de Raza y Equidad de la USC en la que trabaja se opone a los ataques politizados sobre la diversidad, la equidad y la inclusión en las escuelas.
Kasey Meehan, directora del programa por la libre lectura de la organización PEN American habló de los esfuerzos de censura de obras de escritores interfiriendo en los derechos de los estudiantes, socavando el papel de los maestros, administradores de escuelas y bibliotecarios públicos, y creando división dentro de las comunidades.
Dijo que la censura a los libros, sin precedentes, en los niveles K12 está suprimiendo diversas voces y agravando o comprometiendo la capacidad de la escuela para preparar a los estudiantes para ser ciudadanos reflexivos y comprometidos.
Argumentando que el 71% de todos los libros prohibidos están destinados a un público adulto o joven.
“Generalmente la literatura para ellos ya está conceptualizada, creada y desarrollada para llevarlas a las escuelas en ese contexto, así que no se lleva de ninguna manera material obsceno o pornográfico o nocivo a las escuelas”, afirmó.
En la primera mitad del año escolar 2022-2023, han documentado más de 1.400 casos de libros individuales siendo prohibidos. Esto equivale a más de 800 títulos únicos que están siendo retirados del acceso de los estudiantes en las escuelas.
Evelyn Alemán, fundadora de la organización Nuestra Voz: Comunidades para Educación de Calidad, Dr. Tuan Nguyen, profesor adjunto de la Facultad de Educación de la Universidad del Estado de Kansas y Kasey Meehan, directora del programa por la libre lectura de la organización PEN American.