sábado, diciembre 21, 2024
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Barreras culturales y religiosas impiden avance de la vacunación en comunidades de refugiados

Los Ángeles, Ca.- Las fuertes creencias religiosas, la resistencia a las imposiciones y mandatos, el problema del lenguaje y la desinformación provocada por las redes sociales sobre el coronavirus y la vacuna son algunos de los principales desafíos y barreras que enfrentan las autoridades de salud del gobierno de Estados Unidos para convencer a los refugiados de Iraq, Siria y Afganistán radicados en este país de inocularse contra el Covid 19, según comentaron diferentes representantes de esas comunidades.

El profesor visitante del Departamento de Ciencias de Salud Pública de la Escuela de Medicina de UC Davis Fahim Pirzada, la fundadora y directora de Coalición Afgana Rona Popal, los voceros de los refugiados sirios Moustafa Aldiba y Fatima Mohamed Ali y la psicóloga Rehab Alkadi y los representantes de los iraquíes Omar Al Dabagh, Aj Falah y Hazim Raskawka y Juma Ali Nazari activista del Grupo Hazara dieron a conocer lo anterior el pasado 9 de diciembre durante una video-conferencia de prensa presidida por la directora de Ethnic Media Services Sandy Close.

La refugiada iraquí Aj Falah de 29 años de edad y radicada en Detroit mencionó que se ha resistido a aplicarse la vacuna contra el Covid 19 debido a como las autoridades y muchas personas tratan de forzarlos a inocularse.

“Otra razón por la que no me he puesto la vacuna es que no soy la clase de persona que le gusta tomar medicina para todo, me gusta mantener mi cuerpo natural”, agregó. “Además en Agosto del 2020 contraje el coronavirus y para mí fue algo normal, no fue tan malo, entonces por ahora no quiero aplicarme la vacuna, pero si después por alguna razón me la tengo que poner, lo haré”.

“Para evitar transmitir la enfermedad a los que me rodean o que me vuelva a dar sigo usando la mascarilla y trato de estar a salvo”, expresó Falah. “El otro factor que no me motiva a inocularme es que les ha dado el Covid a personas vacunadas y que aun ellas tienen que seguir usando la mascarilla”.

El catedrático afgano de Salud Pública, Fahim Pirzada, explicó que a Afganistán se le llama el “Corazón de Asia” y el 99 por ciento de su población es musulmán, son personas muy conservadoras y con fuertes tradiciones, pero agregó que muchos se vieron forzados a abandonar ese país debido a las condiciones de vida muy inseguras.

“Entonces mi comunidad tiene grandes desventajas como es la barrera del lenguaje, de que las mujeres dependen mucho de los hombres de su familia y la falta de recursos suficientes en materia de salud y educación”, resaltó. “Eso ha hecho que la pandemia nos esté impactando muy fuerte”.

“La información sobre el Covid de acuerdo a nuestra comunidad siempre la han recibido de segunda mano y no todos tienen acceso a los datos correctos”, expresó Pirzada. “Como seres humanos buscan el lado negativo de todo y eso lo han encontrado en las redes sociales donde hay mucha información equivocada y mala”.

Afirmó que las autoridades deben acercarse a nuestra gente a través de las organizaciones comunitarias ya que los afganos son muy tradicionales y creen fuertemente en el Islam, agregó que una forma de convencerlos es que ellos hablen con personas de nuestra comunidad que ya recibió la vacuna para que les cuenten su experiencia y les transmitan confianza.

La directora de Coalición Afgana, Rona Popal, dijo que lo que están viendo con los nuevos refugiados es mucha desesperación, muchos problemas de salud física y mental y de vivienda, agregó que eso y el hecho de que no creen en la vacunación a hecho que aplicarse la vacuna del Covid esté al final de su lista de prioridades.

“Las personas están ocupadas con su rutina diaria, con su familia y eso ha dificultado su acceso a la vacuna, además de que mucha gente de mi comunidad no se vacuna porque son fuertes creyentes de que la vida y la muerte le pertenecen a Dios y por eso es muy difícil convencerlos de que se inoculen”, aseveró. “Las autoridades de salud y los CDC deben dar más información sobre cuales son las consecuencias negativas de no hacerlo y cuales son los beneficios de la vacuna, y esta campaña de concientización debe hacerse puerta a puerta”.

La directora de Coalición Afgana, Rona Popal, dijo que lo que están viendo con los nuevos refugiados es mucha desesperación, muchos problemas de salud física y mental y de vivienda, agregó que eso y el hecho de que no creen en la vacunación a hecho que aplicarse la vacuna del Covid esté al final de su lista de prioridades.

“El Departamento de Salud les dió mucha información sobre el Covid y la vacuna, el problema con nuestra comunidad es que son muy conservadores y piensan que la vacunación está prohibida por su religión”, recalcó. “También influye en ellos, que hay muchas teorías de que es una conspiración entonces todo eso hace muy difícil que ellos crean en la vacuna y se la vayan a poner.

“Se va a necesitar mucha educación e información con los afganos que tienen poco tiempo de haber llegado a este país”, reiteró Popal. “La mejor forma es que reciban orientación por parte de nuestra propia gente que ya haya tenido experiencia con la vacuna”.

Por su parte, Juma Ali Nazari, miembro del Grupo Hazara comentó que su esposa y él contrajeron el coronavirus el año pasado y que no fue una buena experiencia.

Por tal motivo, consideró que el gobierno tiene que dar más información en su idioma y también un mayor acceso a las vacunas.

Los esposos Moustafa Aldiba y Fatima Mohamad Ali hablaron sobre su experiencia con la enfermedad y sobre el constante temor en el que vivían, especialmente ésta última debido a su avanzado embarazo.

“Fue un tiempo de mucha emoción, pero también de mucho temor porque mi esposo no pudo estar conmigo debido a la pandemia”, reveló Fátima.

Moustafa Aldiba informó que sus hijos contrajeron el Covid en su escuela y que lo trajeron a su casa contagiándolos a ellos.

“Nosotros no tuvimos síntomas tan severos sólo algunos problemas para respirar”, aclaró. “Pero los niños sufrieron mucho de falta de aliento, mucha tos, espasmos y fiebre alta, así que como he visto de cerca como afecta, quiero exhortar a la gente a vacunarse para que se protejan ellos y a todas las personas que les rodean”.

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