* El daño económico que se ha hecho a las comunidades negras y latinas es agudo
Los Ángeles, Cal.- Tras asegurar que Covid no solo reveló la enfermedad sino también la vulnerabilidad y la desigualdad en las comunidades de color, expertos señalan que se tienen que invertir en esas comunidades y ser proactivos en dónde colocar los millonarios recursos.
El profesor de Estudios Estadounidenses y Sociales, Manuel Pastor, considerado una de las voces académicas más influyentes del país, participó en una conferencia de prensa organizada por Ethnic Media Service el pasado viernes 7 de mayo junto con Leslie Johnson, vicepresidenta de Desarrollo de la Coalición Comunitaria en el Sur de Los Ángeles: https://estasbien.la/
Johnson dijo que la verdadera pandemia es el racismo y los cambios sociales del coronavirus y que se necesita actuar de manera rápida y estratégica para decidir dónde tiene que ir el dinero para guarderías, seguridad para vivienda, ayuda en el alquiler o hipoteca, oportunidades para los jóvenes y un fondo para la seguridad, entre otras necesidades.
“Los Ángeles está recibiendo mil millones o más y debemos decidir a dónde va ir ese dinero’, indicó tras afirmar que están pidiendo una financiación robusta en la que también se incluyan la asistencia para las organizaciones sociales.
“La pandemia ha tenido un gran impacto y ha provocado el deterioro de la vida de sus residentes en todos los aspectos” indicó tras revelar que el covid-19 empeoró las condiciones persistentes de salud física, financiera, mental, de hacinamiento, subempleo y de educación de la población.
Lo mismo manifestó el profesor Pastor quien dijo que covid ha revelado nuestras dolencias como sociedad con tremendas condiciones preexistentes de desigualdad en relación a la precariedad del empleo, el encarcelamiento excesivo, el trabajo esencial que se trata como si fuera desechable y la amenaza a las familias mixtas por sistemas que sienten incapaces de aprovechar.
Dijo que a mediados de marzo del año pasado hablaron de cómo iba impactar (covid) severamente a la comunidad inmigrante que realiza el trabajo esencial a causa de las condiciones de hacinamiento que ellos enfrentan al igual que los estadounidenses negros.
Lo mismo para las familias con estatus mixto, con la renuencia para aprovechar los sistemas que podrían beneficiarlos en el futuro.
“El gobierno decía que las pruebas de Covid estarían disponibles sin importar el estatus, pero era el mismo gobierno que estaba ansioso por deportarlos y a su abuela, por lo que es bastante difícil desarrollar un nivel de confianza”, consideró.
En el verano el experto dijo hablar sobre el impacto que se estaba ya en la clase trabajadora, mientras aún no se habían trasladado las pruebas (covid) hacia ellos.
Recordó que les había dicho de lo irresponsable que estaba siendo el estado porque desde el principio sabían del devaste en las comunidades negras, latinas y las Isleñas del Pacífico.
Al comienzo del lanzamiento de la vacuna, el catedrático, también señaló la inequidad existente por estar abierta para cualquier persona, de una determinada edad u ocupación, la cual era abrumadoramente blanca.
“Si miras a las poblaciones más jóvenes, más personas de color, entonces es una receta para la desigualdad racial, pero puedes argumentar que todos en esa categoría de edad tenían la misma oportunidad de tener una oportunidad, siempre que tuvieran una computadora, Internet de alta velocidad, la sofisticación tecnológica de la actualización automática de su navegador, lo que podían tomar tres horas libres a la mitad del día para buscar una vacuna y acceder a un automóvil o al transporte público para poder presentarse en Dodger Estadio, que era nuestro mega sitio favorito que dependían principalmente del transporte privado”.
“Realmente era completamente inequitativo, si estás en el lado equivocado de la brecha digital y de la calidad del empleo”, sostuvo al indicar que renunciar a un día de trabajo no está en los planes de los trabajadores con salarios bajos y es algo que los empleadores no permiten, además de que no podrían transportarse si no tienen auto.
Pastor dijo que los gritos que se dieron a nivel estatal dieron origen a un giro de California que puso el 40% de las vacunas en 25% de las comunidades que obtienen los peores resultados en los índices de Lugares Saludables de California, moviéndose rápidamente a las clínicas comunitarias.
“Pero yo en marzo de 2020, dije que esto iba a devastar a los inmigrantes, con un par de meses de anticipación y estaba hablando de vacunas y equidad, incluso cuando se estaba configurando el sistema”.
“Lo que pienso ahora es el daño que se ha hecho a nuestras comunidades de bajos ingresos, comunidades de color. Deberíamos haber estado proporcionando el acceso de tránsito de la misma manera que deberíamos haber estado proporcionando las vacunas”, opina.
Y dijo que como sociedad estamos saliendo de la crisis pero significa que los más privilegiados van a poder seguir yendo a trabajar e ir a un restaurante.
Sin embargo, dijo que el daño económico que se ha hecho a las comunidades negras y latinas es agudo, por lo que se tienen que seguir hablando y destacando la pérdida de ingresos y empleo.
“Tenemos familias que hasta la aprobación de la Ley de Ayuda Estadounidense estaban esencialmente excluidas de los fondos de ayuda federales. E incluso ahora, están un poco reacios a intervenir, porque les preocupa que si lo hacen, eso pueda contar en su contra, si eventualmente hay una ruta hacia la legalización en el futuro”.
Por lo que respecta a la educación dijo que hay un gran daño y ejemplificó que en el condado de Los Ángeles el 13% de los niños que estaban en K hasta el 12, cuando regresaron a casa (durante la pandemia), no tenían una computadora con Internet de alta velocidad, pero esa cifra para los niños negros y latinos fue de alrededor de 36 a 40%.
Y estos son los más reacios a volver a las aulas porque han sido afectados personalmente por Covid de una manera que les da miedo contraer la enfermedad, apuntó.
“Creo que deberíamos tener una expansión masiva en la escuela de verano. Creo que hay una razón por la que probablemente eso no sucederá. Pero lo que necesitamos para el próximo año es mucha tutoría, mucha ayuda al nivel de la escuela secundaria, y debe ir a las comunidades”, estimó.
También dijo que sabe que las cosas han sido difíciles para las personas que han experimentado la pérdida directa de familiares, que han sentido la inseguridad de sus ingresos y que se han dividido entre la necesidad de ir a trabajar y la de mantenerse saludable y que han sentido que el gobierno los ha traicionado y no ha prestado atención a sus necesidades.
En cuanto a la salud dijo que se tienen que pensar en el daño que ha causado en las comunidades que más han experimentado la enfermedad, y donde había desconfianza entre la gente pobre que no podían acceder a algunos programas de salud debido a la falta de seguro.
Particularmente en el caso de la comunidad de inmigrantes indocumentados en donde habrá mucho daño a la salud y salud mental.
“Necesitamos promover los recursos de salud mental culturalmente relevantes y sensibles”, porque a menudo se consideran como algo que debe tratarse de forma aislada, apuntó, tras indicar que se necesitan gente de color que hablen de estos temas con sus propias comunidades para que las personas se sientan seguras de acceder a esos recursos”.
Necesitamos que la gente sepa cómo acceder a esos recursos, que piensen en adelante, en la igualdad en las vacunas y los traumas que van a encontrar y desarrollar con el tiempo, indicó Pastor.
