- Deben equiparse y luchan contra ello, expertos
Los Ángeles Cal.- La violencia estructural esta integrada en nuestra sociedad, y las mujeres deben de equiparse y luchar contra ella, consideran expertos al analizar el fenómeno de incremento de los delitos de odio contra las minorías y en especial contra las mujeres, que son las que llevan la peor parte.
Organizada por Ethnic Media Services, el pasado viernes 8 de octubre, en la video conferencia participó Basima Sisemore, del Programa de Justicia Global quien presentó un importante informe sobre la islamofobia -antipatía u odio contra el islam y los musulmanes- en el que se revela que las mujeres por su aspecto de vestimenta son las que más ataques de odio sufren comparadas con los hombres.
Es el primer estudio a nivel nacional que se hace con la participación de 1,123 sumulmanes y musulmanas americanas, explicó la experta, al hablar que las mujeres son mas visibles debido a su ropa que las identifica como musulmanas, externamente.
Elsadig Elsheikh, Director del Programa de Justicia Globa dijo que desde la época de la esclavitud los musulmanes han estado presentes en el país, indicando que estudios revelan que el 20% de la población era esclava a quienes les costaba practicar su religión.
“Les tomó 300 años para que pudieran expresar su identidad religiosa, El islam no es nada nuevo en los Estados Unidos, han estado integrados al país”, afirmó.
Dijo que el estudio indica que la islamofobia existe desde hace mucho tiempo en el país y no solo desde los ataques del 9/11.
“Pero el evento (del 9 de septiembre del 2001) amplificó el problema que está basando en el racismo social y la estructura racial racista del país, que se ejecuta no solo en lo individual sino también en las instituciones de manera generalizase y se ha usado como una herramienta política para los demagogos y los supremacistas blancos”, comentó.
Dijo que luego de lo ocurrido en las elecciones de 2016 con Trump, no fue por la maldad de él, sino que ya existía a nivel nacional la islamofobia. “Parece ser que la población musulmana está en la atención de cualquier falla de la sociedad”, dijo, al considerar que es por que hay un miedo contra los musulmanes.
La islamofobia, indicó, es muy difícil para la comunidad musulmana americana e indivualmente, refiriendo que no es lo mismo para otros grupos porque incluye su religión, lo que hace que se incremente su odio contra ellos.
“El país dice que protege a la religión, pero hace difícil que se practique para quienes tienen que esconder su identidad religiosa”, aseguró al indicar que una tercera parte de los entrevistados respondieron que intentan esconder su identidad religiosa.
Añadiendo que para las mujeres es más marginalizado y son las poblaciones de 13 a 29 años los que más intentan ocultar su identidad religiosa.
De los resultados del estudio destacó que las personas ocultan su identidad religiosa y se auto censuran porque no quieren hablar de eso, aclarando que 9 de cada 10 mujeres hacen eso cotidianamente.
“Tratan de evitar hablar de su corazón cuando se trata de temas de la sociedad porque les da miedo que eso se traduzca en violencia”, afirmó el experto quien antes reveló que el Centro de Investigación determinó que la población musulmana en Estados Unidos es de 3.5 millones, lo cual representa el 1% de la población.
El propósito de la encuesta sobre islamofobia en la comunidad musulmana dijo es saber qué impacto ha habido en sus vidas y cómo interactúan con la sociedad americana.
Sisemore habló respecto del tema llamado ‘feminismo imperialista’, indicando que la narrativa hace ver que las mujeres musulmanas están reprimidas y por eso tienen que ser salvadas por los blancos que son sus salvadores.
Agregó que dicha narrativa es usada por el imperialismo estadounidense por ejemplo en su intervención con Afganistán.
“Hay casos como en Arabia Saudita que las mujeres tienen que salir acompañadas, pero las mujeres no necesitan ser salvadas”, afirmó, tras hablar que esos son casos extremos.
La experta dijo que mucha gente en África son musulmanes y que las mujeres luchan contra líderes dictadores, por lo que personalmente combate la idea de que las mujeres árabes están siendo oprimidas en los países musulmanes solamente.
Helen Zia, Activista de la AAPI, autora y periodista, indica que desde hace dos años los chinos e isleños del pacífico han experimentado lo que llamó un maremoto de incidentes de odio, en especial contra las mujeres mayores en los Estados Unidos.
Dijo que se han reportado más de 9 mil incidentes desde marzo del 2020 y 2021, de los cuales más del 66% de ellos han sido ataques contra mujeres asiáticas y jóvenes desde kínder hasta 12 años.
“El conteo es bastante bajo” estimó, al hablar que el tema de la violencia y odio no es nada nuevo y que igual que la islamofobia, lo mismo pasa con los asiáticos americanos.
Señalando que los ataques de odio y racistas se basan en la idea de algo foráneo, invasor, en frases como ‘Hagamos América Grande’ y señalando a la gente de color como menos, mientras que los ataques por género y muertes de mujeres se trata de hacerlas ver que son gente sin importancia.
Lamentó que las gente de color y mujeres sean quienes más se enfrentan a múltiples ataques y es muy probable que no los reporten porque a ellas se les culpa y se enfrentan a estigmas tanto en la familia como en la comunidad y porque muchas veces no se les toma en cuenta, indicó.
Zian quien es autora del libro titulado “El Sueño de los Asiáticos-americanos” habló de casos en los que ni las mismas mujeres con poder o fama se salvan, ejemplificando el caso de las campeonas olímpicas que sufrieron de abusos por largos años de su médico.
“Las mujeres no quieren reportar porque se les visibiliza”, atajó, para luego hablar del momento xenófobo que vive la comunidad asiática porque ahora parece, dijo, que China es el enemigo de Estados Unidos.
La escritora señaló que no solo ven a los chinos como enemigos sino que también alguien que parece árabe, del medio oriente, porque la retórica política es que ellos vienen a dañar.
Lamentablemente dijo que esas políticas van a continuar y es lo que está pasando, cuando se dan casos como el de sucedido a una chica, embarazada, de 19 años en Nueva York que fue lanzada contra el tren y decapitada porque una persona dijo que tenía miedo.
El 4 de Julio y el día de Pearl Harbor, los consideró como los días más peligrosos para los asiáticos americanos.
Zia considera que se la comunidad necesita organizaciones como el Foro Nacional de APPI y la Alianza de Trabajadoras Domésticas, indicando que las trabajadoras domésticas y las de agricultura son las más vulnerables de la sociedad.
Irene de Barraicua, directora de Operación y Relaciones Públicas de la organización Líderes Campesinas, dijo que algunas de las mujeres latinas viven explotación sexual y laboral en sus mismos centros de trabajo.
Señalando que durante la pandemia se ha incrementado la violencia hacia las mujeres inmigrantes.
“En esta idea antinmigrante se afecta a los latinos. En mi vecindario una mujer fue atacada, derribándole su carrito”, dijo, al hablar que han escuchado muchas historias similares, que durante la pandemia se han incrementado.
Barraicua comentó que las primeras en ser despedidas por los empleadores durante la pandemia han sido las mujeres y de ellas las más mayores, lo que han hecho su vida más difícil a las madres solteras o mujeres solteras que se han visto sin acceso tanto a comida como a servicios de ayuda.
“Hemos visto como las mujeres latinas son víctimas de la violencia de la esclavitud moderna: que son las mujeres de la agricultura”, indicó para luego señalar que mujeres son arrestadas, deportadas y afectadas por las venganzas.
Indicando que las mujeres latinas han sufrido mucho de violencia sexual por su estado de migración y de miedo a deportación, y otras han sido víctimas de tráfico sexual después de haber llegado a este país, al que llegan intentando sobrevivir y tener familia.
Por eso dijo que en los 80’s surgieron movimientos comprometidos en la sexualidad y marginalización de las mujeres que se reunieron en Coachela, California, para luchar contra la discriminación.