- La oaxaqueña Miriam López destaca también como activista y voz de la comunidad durante este Mes Internacional de la Mujer
Los Ángeles, Cal.- Fiel creyente de que uno de los roles de la mujer es luchar por la preservación de la especie humana y animal, del medio ambiente, cultural y del lingüístico, Miriam López destaca como una fémina oaxaqueña que alza la voz por la igualdad de géneros, forja líderes e impulsa a las nuevas generaciones a superarse y alcanzar sus sueños.
López, una bailarina de ballet folclórico por 50 años, maestra de baile por casi 40 años y fundadora del Ballet Folkórico Nueva Antequera, nació en la ciudad de Oaxaca, de padres indígenas de quienes aprendió a difundir el mensaje de que la educación es la principal herramienta para superarse en todos los aspectos y la importancia del respeto.
La activista se estableció en Los Ángeles en 1993 donde empezó a impartir el folclor oaxaqueño, y ahora, ve con orgullo que muchos de sus alumnos dirigen nuevos grupos folclóricos.
“Quizá mi pasión por el baile folclórico es por don, pero es el gusto que tengo de todo mi entorno que en donde crecí desenvolví y que mi gusto por la manera en que se desarrollan todas las actividades culturales”, expresó.
La oaxaqueña también le dio crédito a su madre, quien le inculcó la cultura y tradiciones y a impuso a volar para lograr sus sueños.
“Como mi mamá me dijo muchas, soy muy inquieta y siempre quise saber mas de lo que trataban esas actividades. Es por eso que nací para esto. Soy un promotor y practicante de mi cultura’, expresó.
López mencionó que también disfruta difundir otros tipos de expresiones culturales como escultura, pintura y textil.
“Es un modo de vida. Mi familia aquí, mi esposo, mi hija y yo vivimos diariamente nuestro folclor y cultura oaxaqueña. Mi casa es todo un museo de como debe ser una casa oaxaqueña”, dijo. “Lo que pasa es que los oaxaqueños siempre estamos envueltos en nuestra cultura, la estamos practicando constantemente todos los días inconscientemente”.
Agregó que también se dedica a promover artistas mexicanos en Los Ángeles.
“Traemos maestros de baile de diferentes comunidades o delegaciones que se presentan en la Guelaguetza”, expresó.
López dijo que se considera una mujer privilegiada por la confianza y valores con que la educaron sus padres.
“Por todo eso, ahora soy quien soy y tengo la oportunidad de transmitir todo eso a mis alumnos. Yo fui muy privilegiada con padres indígenas que llegaron a la ciudad de Oaxaca con grandes sueños.
“Ellos pensaban que la educación era lo mas importante a pesar de que ellos no tuvieron oportunidad de ir a la escuela porque se casaron muy jóvenes y tenía que trabajar, pero para ellos era muy importante que todos sus hijos fueran bien educados, además, mi padre no fue machista”, comentó.
Dijo que como mujer ha sido más difícil alcanzar los logros, pero no imposible.
“Creo que los logros alcanzados que hemos tenido como mujeres, y lo digo en general, desde las sufragistas (mujeres que construyeron un movimiento femenino por el derecho al voto en 1905) y de la que gozamos ahora nosotros, son un proceso y tenemos que seguir reforzando los porque es un legado que debemos dejar.
“A mis alumnas les inculcó el respeto, que deben ser tratadas con igualdad, de que no debe haber diferencias y que se debe valorar a todos los seres humanos. Tengo una hija, y soy dura con ella porque mi labor como maestra me hace ser dura, pero siempre trato de darle toda la libertad posible y enseñarle que debe luchar por lo que quiere, pero también ser empática, sorora, y que ante el menor indicio de injusticia, levante la voz porque si no lo hacen, están retrocediendo”.
Las injusticias sociales también provocan en López esa sed de lucha y no duda en unirse a movimientos que generen un cambio social en beneficio de un colectivo.
“Ya sea en beneficio de la comunidad, feminista o un colectivo que sienta que tiene responsabilidad social, cultural y ecológica.
“Trabajo mucho con la comunidad LGTB, apoyo mucho aquí y en México, especies en peligro de extinción, esa es otra cosa de mi vida, que siento que se les debe tener respeto, y que las mujeres tenemos un papel muy importante en la preservación, no solo de la cultura o lenguaje, sino también en la preservación de nuestra especie humana, animal y medio ambiente”, añadió. “Entonces debemos tener respeto en general”.
López agregó que lo que actualmente tiene muy presente es su responsabilidad con sus alumnos, con su familia y comunidad.
“Por eso es que seguimos con nuestro trabajo comunitario que empezamos desde hace muchos años. Creo que he sido forjadora de varios líderes y creo que he impactado de una manera muy positiva a personas que me rodean porque tenemos tantos profesionistas, tanto hombres como mujeres. Yo a mis alumnos les digo que son exitosos porque la cultura es lo único que nadie nos puede robar. Nuestra cultura e idioma, es lo que debemos preservar”, dijo López.