- * Con estadísticas en mano muestran las disparidades que afronta el sector femenil
Los Ángeles, Cal.- Para reducir las disparidades y las desigualdades existentes en los salarios y oportunidades que se otorgan en los lugares de trabajo a las mujeres negras en California, diversas organizaciones buscan impulsar un movimiento fuerte que contribuya a la creación de nuevas leyes que contemplen la intersección de raza y género para poder pelear legalmente cuando sean víctimas de discriminación o de agresiones laborales.
La presidente y CEO de California Black Women’s Collective Empowerment Institute, Kellie Todd Griffin, la estratega y publicista de SCU Strategies la doctora Sharon Uche, la socia y gerente de Evitarus Public Opinion Research (una empresa líder en investigación de la opinión pública) Shakari Byerly y la agente innovadora Glenda Gill dieron a conocer lo anterior durante la videoconferencia de prensa organizada el pasado martes 4 de Marzo por la directora de Ethnic Media Services Sandy Close y la directora de California Black Media, Regina Brown para dar a conocer el nuevo reporte que revela las inequidades en los centros de trabajo para las mujeres negras en California.
Kellie Todd afirmó que están elevando la voz y su participación sobre los problemas y las prioridades que tienen las mujeres negras en el estado dorado para asegurar una representación y reparación adecuada de los daños utilizando los datos del estudio elaborado por Evitarus para impulsar en forma más efectiva el cambio de políticas locales y la transformación de las prácticas a nivel estatal.
Por su parte, Shakari Byerly aseveró que de acuerdo a las investigaciones que han realizado sobre la materia, en California hay 1.1 millones de mujeres negras que es la quinta población más grande del país, las cuales enfrentan barreras y brechas de disparidad cuando se trata de brindar servicios a este sector poblacional, y agregó que esas desigualdades existen en la intersección de la raza y género.
“En el 2023 realizamos una investigación centrada en la experiencia de mil 252 mujeres negras en California”, mencionó. “Donde 4 de cada 5 mujeres negras dijeron afrontar dificultades por la inflación, 8 de cada 10 mujeres negras afirmaron sufrir discriminación o maltrato debido a su raza o género y también mencionaron que por la misma razón se ven afectados sus ingresos y ganancias”.
“Además notamos que las mujeres negras tienen un mayor nivel educativo que los grupos demográficos que tienen ingresos más bajos sin embargo sus salarios aún no están igual que el de las mujeres blancas, los hombres blancos o el salario medio de California”, resaltó Byerly. “El mes pasado publicamos un informe donde se analizaba la brecha de ingresos entre mujeres negras, las madres solteras negras y los hombres blancos y observamos que existían desigualdades y disparidades económicas sistemáticas”.
De acuerdo a ese estudio, indicó que los hombres blancos ganan 90 mil dólares, las mujeres negras 54 mil dólares y las madres solteras 53 mil dólares, lo que muestra que la disparidad es muy grande en relación a este último grupo, lo que significa 8 años adicionales de alimentos, un año adicional de vivienda y alquiler, 19 años de servicios públicos, lo que mejoraría la calidad de vida de ellas, pero no se preveé que esta brecha económica se cierre en casi 100 años.
Byerly señaló que según el estudio sobre la experiencia laboral que se realizó a 452 mujeres negras en toda California, un 57 por ciento de ellas aseguraron haber experimentado racismo o discriminación en el trabajo sólo en el último año, el 38 por ciento de ellas no están satisfechas con su actual trabajo, cerca de la mitad no sienten que las oportunidades de liderazgo o de avanzar estén disponibles para ellas, aproximadamente el 48 por ciento han sido juzgadas injustamente por el supervisor o jefe, el 64 por ciento dijeron que la raza y etnicidad son un factor clave en los comentarios negativos en el trabajo.
Comentó que los resultados de la encuestas muestran que el 62 por ciento de las mujeres negras reportaron sentirse satisfechas con el trato que recibían cuando su supervisor o jefe era un hombre o mujer negra.
Todd afirmó además que en el estudio encontraron que los informes de racismo, discriminación, esterotipos y microagresiones a través de mensajes de correos electrónicos fueron más frecuentes en el sector público que en el privado y en las organizaciones sin fines de lucro.
Aseveró que en base a todos esos datos presentaron propuestas legislativas y no legislativas en el Estado con las cuales se busca fortalecer la equidad salarial y abordar algunos de los problemas sistemáticos que se presentan cuando hay una intersección entre raza y género, es decir, ser mujeres y de raza negra.
Con eso, explicó, buscan que haya un pequeño cambio en la ley para poder crear la capacidad de presentar una queja formal basada en la raza y el género.
Para reducir esas disparidades, Glenda Gill recalcó que se tiene que hacer un mayor esfuerzo para lograr el cambio de políticas y la transformación de las prácticas para la próxima generación de mujeres negras.
También expresó que a nivel nacional hay 1.9 millones de mujeres negras que poseen empresas, emplean a más de 375 mil empleados y representan el 35 por ciento de la fuerza laboral.



Kellie Todd Griffin, Presidente y CEO de California Black Women’s Collective Empowerment Institute, la Dra. Sharon Uche, estratega y publicista de SCU Strategies y Glenda Gil, agente innovadora de 21st Century. (de izq. a der.)